Bienvenidos una semana
más a nuestro blog. En este post os voy a hablar de las canciones infantiles, voy a hacer un análisis de ellas y mostraré algunos ejemplos de la misma.
Cantar con los niños y niñas es algo innato, divertido y educativo y ayuda a aumentar la hormona de la felicidad. La canción infantil se ha transmitido de generación en generación y forman parte de la cultura popular, aunque actualmente han surgido nuevas canciones infantiles, de otro estilo musical y grupos especializados en espectáculos audiovisuales dirigidos al público infantil.
Con las canciones infantiles se pueden trabajar las 3 áreas de la Educación Infantil, ya que pueden conocerse a sí mismo con ellas, al entorno que nos rodea y se utiliza el lenguaje oral como forma de comunicación, por lo tanto se puede considerar una actividad globalizadora.
Las canciones infantiles se caracterizan por estar compuestas por una letra sencilla, que riman y repetitivas. Suelen ir acompañadas de movimientos motrices, gesticulaciones y juegos. Son cortitas, se comprenden con facilidad y también son pegadizas para potenciar su memorización.
En cuanto a ritmo, las figuras musicales que solemos encontrar en las canciones infantiles son: negras, corcheas, silencio de negra, corchea o semi corchea con puntillo...
Los compases suelen ser sencillos, siendo los más habituales los de 2/4, 3/4, 4/4.
La melodía de este tipo de canciones tienen que ser simples, agradables y cortas. Las notas deben estar repetidas, deben ser naturales y estar en grados conjuntos, y suelen empezar por Do.
Para que una canción se pueda clasificar como estructura infantil en cuanto a estructura se refiere, cada frase de la canción debe tener un número cerrado de compases, es decir, si la canción tiene 2 frases, la estructura debe tener 4 compases en cada frase, en total 8 compases.
Las canciones infantiles en el aula son muy importantes, ya que estas conllevan a muchos beneficios, entre los que encontramos una mejora de la adquisición del desarrollo lingüístico de los niños y niñas, permiten ampliar su vocabulario, su fluidez verbal, su comprensión y ayuda a adquirir nuevos conocimientos. Cabe destacar la importancia que estas tienen en el desarrollo intelectual, auditivo, sensorial, motriz y sobre todo social, mejorando la educación emocional de este, ya que los ayuda a canalizar sus sentimientos.
Algunos ejemplos de canciones infantiles populares son las siguientes:
Susanita tiene un ratón:
El patio de mi casa:
Que llueva, que llueva:
La gallina turuleca:
Algunos ejemplos de canciones infantiles más actuales son:
El baile de los animales:
Bartolito:
Baby shark:
Quiero proponer algunas actividades musicales que se pueden realizar en el aula.
- Escuchar con la imaginación. Esta actividad consiste en realizar un dibujo escuchando una música y plasmar en el papel una historia con lo que nos sugiere la audición musical.
- Movernos al ritmo de una música, según lo que nos transmita.
- Asignarles palabras a músicas. Esta actividad consiste en escuchar varios fragmentos de obras y a cada una asignarle una palabra. Una variación de esta actividad sería crear una escena con lo que nos transmite la obra.
Por lo tanto, podemos decir que las canciones son de vital importancia ya que nos ofrecen muchos beneficios y podemos sacar mucho partido de ellas.
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